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La Sagrada reliquia el pasado
Lunes Santo de 2016 |
La Sagrada Reliquia del "Lignum Crucis", la cual es venerada en la Basílica Menor de Nuestra Señora de Los Milagros Coronada, formará parte un año mas, como viene siendo ya tradicional, del cortejo procesional de nuestra Cofradía el próximo Lunes Santo 10 de Abril de 2017. La misma, irá portada en una parihuela que será cargada por cuatro servidores vestidos de librea e iluminada por cuatro cirios de cera verde, color que identifica al madero de los justos en el que padeció y murió nuestro Señor Jesucristo.
Del latín "Lignum", (leño o madero) y "Crucis" (de la Cruz), se trata de un relicario realizado en el año 1734 procedente de la desaparecida Cofradía de Sacerdotes de San Pedro de nuestra ciudad; alojado en la teca central, se encuentra una astilla proveniente de la fragmentación de la Verdadera Cruz de Nuestro Señor Jesucristo.
El descubrimiento del Santo Madero, fue llevado a cabo según la tradición por Santa Elena, madre del Emperador Constantino en el año 326. Tras el hallazgo, se produjo un proceso de dispersión de fragmentos del madero, que comenzaron a ser fraccionados y diseminados por toda la cristiandad en forma de reliquias, siendo esta una de ellas.
El "Lignum Crucis" recibe culto de adoración en grado de Latría relativa, o sobre las cosas, al ser parte de la Cruz que estuvo en contacto físico y haber sido bañada e impregnada de la Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, habiéndose consumado en ella la redención. Este grado de culto sólo es superado por el de Latría Absoluta o dedicada a Dios, verdaderamente presente en el Sacramento de la Eucaristía. En la cruz de Jesús la muerte ha sido vencida, y se ha abierto para siempre el camino de la resurrección y de la vida. Adoramos, pues, la Sagrada Reliquia del "Lignum Crucis", porque ella, es el punto de referencia de nuestra fe y de nuestra esperanza. Por ella Jesucristo nos ha salvado y liberado.
También, y como Hermandad Franciscana que somos, recordamos que Nuestro Titular el Seráfico Padre San Francisco de Asís, desde su conversión, veneró con grandísima devoción a Cristo Crucificado y los Misterios de su Pasión. Hasta su muerte no cesó, con su vida y su palabra, de predicar al Crucificado. Y en 1224, mientras estaba sumido en contemplación divina en el monte Alverna, el Señor Jesús imprimió en su cuerpo los Estigmas de su Pasión.
Finalmente queremos agradecer a nuestro Director Espiritual el Rvdo. Padre Don Diego Valle Serrano, Párroco y Rector de la Basílica de Nuestra Señora de los Milagros Coronada, que haya tenido a bien el cedernos un año mas el Relicario del "Lignum Crucis", al igual que lo viene haciendo desde hace algunos años durante el mes de Septiembre, con motivo de la celebración en nuestra Capilla de Jesús de los Afligidos de la Festividad de la Exaltación de la Santa Cruz.
